Tormenta de ranas. Pauline en la Playa.




1. Somos dos.

Somos dos, miraré con lupa, tú el cordón, yo sostengo el tenedor. Te querré sin saber muy bien porqué y mi amor en un frasco de formol, y no paro de comer dulce crema de pastel, mi barriga engordará hasta no ver más mis pies.

Sin razón te regalo el corazón y además lo destilo como alcohol. Sentirás que chirría tu dolor y verás chiribitas de color, y no paro de comer dulce crema de pastel, mi barriga engordará hasta no ver más mis pies.


2. El gato de Cheshire.

Quisiera ser gato de Cheshire para poder desaparecer, gato de Cheshire quisiera ser, y jugar con los gatitos de esta y otra barriada, y colgar mi sonrisa como luna descarada.

Quisiera ser gato de Cheshire para poder desaparecer, gato de Cheshire quisiera ser, y quitar mi cabeza cuando más de la lata, y dejar que aparezca ante atónitas miradas.

Quisiera ser gato de Cheshire para poder desaparecer, gato de Cheshire quisiera ser, y reírme de Alicia cuando esté despistada, y borrar mis orejas cuando se ponga pesada. Quisiera ser gato de Cheshire para poder desaparecer, gato de Cheshire quisiera ser, y burlarme a conciencia de viejas monarquías, que se atreva la reina a cortarme la cabeza.


3. Rueda corazón.

Pobre corazón, con razón se cayó del techo, al ser de complexión circular rueda por mi cuerpo. Torpe al navegar y encontrar el pulmón derecho, y en mi expiración va el amor a parar al techo.

Tal vez la emoción lo expulsó fuera de mi cuerpo porque al bostezar se salió por la boca, el corazón, y rueda y rueda por la ladera, y rueda y rueda, y se cae.

Pobre corazón, con razón se cayó del techo, al ser de complexión circular rueda por mi cuerpo, y rueda y rueda por la ladera, y rueda y rueda, y se cae.


4. Más pequeña que un botón.

Si sale mal domaré mi alma y un café, y seguiré, por qué no, de cara a la pared, y me caerán tormentas que son de ranas moradas, y con el sol haré del salón un horno.

Vuelve a pasar y el temor se asienta en mis pies, y una vez más por error se ha vuelto comodón, y me caerán tormentas que son de ranas moradas, y con el sol haré del salón un horno.

Llego a pensar que el colchón me tiene compasión y hoy seré, como no, más pequeña que un botón, y me caerán tormentas que son de ranas moradas, y con el sol haré del salón un horno.


5. Mab.

Mirad, es Mab, diminutos sus secuaces, será un largo viaje llegar a tu nariz, mirad, es Mab, descansará en tu dedo el mosquito su cochero, traza un mapa a tu nariz, mirad, es Mab, reina de las ilusiones mas bruja en ocasiones, se acerca a tu nariz.

Mirad, es Mab, enviada de Verona, proclamada embaucadora, se adentra en tu nariz, que sí, por mí, que tengas dulces sueños con duendes palaciegos y amores de jardín. Es Mab…


6. Insignificancia en sí menor.

Es tan bonito y nada especial, algo insignificante, es anodino y habitual, es sólo ese café de las diez que algunos llaman el tentempié.

Es tan superfluo, es tan normal, es tan irrelevante, algo pequeño, intrascendental, es sólo el edredón de algodón cuando me tapo hasta el cuello.

Zas, será sólo un instante, es más, algo insignificante, es eso que ves, no tiene más. Es tan bonito y nada especial, algo insignificante, es anodino y habitual, es sólo ese café de las diez que algunos llaman el tentempié.


7. Cabezas locas.

Coge mi mano y echa a volar, como la lluvia sobre cabezas locas de atar, y volaremos hasta planear, y gritaremos hasta que rompa todo el cristal. Dejaré migas de pan y sabré regresar.

Desciendo con miedo en Nunca Jamás y toda la gente, muy sonriente, saluda al llegar, tú no, yo contenta, te sigo sin más, me coges del brazo, volamos despacio, de vuelta al hogar. Dejaré y sabré regresar.

Coge mi mano y echa a volar, como la lluvia sobre cabezas locas de atar, locas de atar, locas de atar.


8. Atlas.

Repaso sus palabras una y otra vez, mil interpretaciones y algo que no sé, y esto no hay quien lo aguante, ni siquiera Atlas en su espalda, ni siquiera el señor Sansón.

Si hay suerte esta semana llama antes que yo, mis frases preparadas van al traste sólo en un instante, no hay manera ni de insinuarme, doy gracias al encuentro por casualidad y finjo indiferencia por si al rato caigo inconsciente, por si acaso cojo y me declaro.

Y ya ni la paciencia juega a mi favor, esto no hay quien lo aguante, ni siquiera Atlas en su espalda, ni siquiera, ni siquiera yo.


9. Ley de acción y reacción.

Es la ley de acción y reacción, sentidos contrarios, misma dirección, chocarán partículas de este amor que nos cambia de velocidad, y se da la oscilación, un choque particular, y me escapo a la fuerza de la gravedad.

Sin querer resuelvo la ecuación, tangente a la curva del corazón, sumaré tus lados, quiero una fórmula que me consiga explicar. ¿Por qué tanta ondulación, por qué tanta intensidad, por qué ignoro la ley de la relatividad?

Es la ley de acción y reacción, sentidos contrarios, misma dirección, sentidos contrarios, misma dirección, sentidos contrarios, misma dirección.


10. Es natural.

Es natural, no tiene remedio y no está mal, todo tiene su final, pero esta vez es un buen momento para evitar sentarme y ver que pasa mi tiempo, recordaré, hay más opciones y escogeré pan, vino, postre o café.

Es natural, no tengo remedio, ahora ya sé que nada es suficiente y eterno, recordaré, hay más opciones y escogeré pan, vino, postre o café.

Es natural, no tiene remedio y no está mal, todo tiene su final, pero esta vez es un buen momento para evitar sentarme y ver que pasa mi tiempo, recordaré, hay más opciones y escogeré pan, vino, postre o café, hay más opciones y escogeré la tarta, hay más opciones y escogeré uno durante un mes.


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Año: 2001.
Procedencia de la banda: Gijón (Asturias), España.
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