1. Mi hermano carnal.
Ana tiene, Ana tiene un hermano, un hermano gemelo y él cada vez se engancha más, y cada vez, cada vez lo ama más, y cada vez su corazón se estira más.
Calentaré tu alma fría en las entrañas de un animal, sé que duele, es la vida, sólo la muerte no causa dolor. ¿Cómo puedo superar el dolor de mi hermano carnal hoy? ¿Cómo puedo estirar mi corazón para amarte aún más hoy?
Las escaleras del gran proveedor cada vez se empinan más, los caminos del señor son tan duros y pedregosos. ¿Cómo puedo superar el dolor de mi hermano carnal hoy? ¿Cómo puedo estirar mi corazón para amarte aún más? ¿Cómo puedo superar el dolor de mi hermano carnal hoy? ¿Cómo puedo estirar mi corazón para amarte del todo?
2. Viaje de redención.
Cae la noche con su manto gris, mira esa fila de antorchas que van una tras otra en viaje lunar, la Familia Lagarto peregrina ya hacia la Meca Sideral, corriente de insectos hacia la luz.
Ésta es la vía de la perfección que les pondrá más cerca de Dios, ninguno sabe bien dónde va, ninguno sabe si es mejor, pero es su viaje de redención, éste es su viaje de redención, sus alas se queman con el sol.
Ya está tranquilo el corazón, vive la calma de la destrucción, ninguno sabe bien dónde va, ninguno sabe si es mejor, éste es su viaje de redención.
3. Humo azul.
Me he quedado embobado con el humo azul de mi cigarro hasta la luz, crece y se retuerce sobre mí de forma extraña, como tú, como tú, como tú, humo azul, como tú.
En la orilla las olas del mar, y mis pies desnudos, qué bien se está, ahora noto su frescor, luego retroceden y se van, como tú, como tú, como tú, humo azul, como tú, humo azul…
En el desierto estaba yo cuando delante vi a Dios, un espejismo abrasador que entre mis huesos se desvaneció, como tú, como tú, humo azul...
4. Efervescente.
Tu efervescente admirador está en el suelo, deshaciéndose a tus pies, está gimiendo, por un poco de calor, por un helado de corazón, golpe tras golpe de corazón, de tu helado de corazón.
Tu efervescente servidor te saluda, atentamente disolviéndose en un mar de dudas, entre los dientes ya le está brotando espuma de limón, golpe tras golpe de corazón, de tu helado de corazón.
No pases nunca bajo ese árbol, que yo lo hice y desprendió como un polvillo que me produjo varias fracturas y me volvió, y me volvió efervescente, y me volvió efervescente, y me volvió efervescente, y me volvió efervescente, efervescente, efervescente, efervescente, efervescente.
Tu efervescente admirador está en el suelo, está temblando de emoción, de frío y miedo.
5. Hey, Lázaro.
Hey, Lázaro, es un milagro que puedas andar, sueña húmedo, dirige tu nave hacia la humedad. Levántate, elévate y piérdete en la humedad, levántate, elévate y piérdete en la humedad.
Hey, Lázaro, es un milagro que puedas andar, sigue el rastro, entre las medias está la señal. Levántate, elévate y piérdete en la humedad, levántate, elévate y piérdete en la humedad, oh padre viento, elévame y piérdeme en la humedad, oh padre viento, elévame y piérdeme en la humedad.
6. Ángel transparente.
En la penumbra su portal se convertía en suite nupcial. Nuestra bendita fragilidad, un día este vicio nos va a matar, más suave y más transparente que un ángel es su piel.
Toda la noche busqué las sábanas, tapándome con fastasmas, más suave y más transparente que un ángel, transparente es su piel, más suave y más transparente que un ángel es su piel.
Una eficaz alquimia en la sangre y dormiré como los ángeles, más suave y más transparente, y más suave que los ángeles y que el aire es su piel, más suave más transparente, y más suave que los ángeles y que el aire es su piel.
7. Mis huesos son para ti.
Aunque a veces pueda beber hasta estrellarme, y aunque también un día pudiera arruinarme el cuerpo y la vida, has de saber que mis huesos son para ti, mis huesos son para ti, para ti.
Aunque me veas clavándome los dedos en el centro del hígado hacia adentro, abriéndolo como un pan y repartiéndoselo a los perros, y repartiendo caos en mi familia y puñetazos a todos los demás, mis huesos son para ti, mis huesos son para ti, mis huesos son para ti, para ti.
Y aunque pueda perder el culo por una noche, por una sombra de ojos, una noche, escupiendo besos de pitón, no soy yo, no soy yo, mis huesos son para ti, mis huesos son para ti, mis huesos son para ti, para ti.
8. Fuerte!
Fuerte fue cuando Nicodemo pervirtió a San Áspide aquel verano fatal, fuerte le dijo Ana a su hermano y le apretaba las manos aquella noche fatal, fuerte me entran ganas de cogerte y darte lo que te mereces, eso y más, me entran ganas de cogerte y darte lo que te mereces, y darte todo y más.
Solos en una isla griega, siempre tirándose a matar, solos en algún otro planeta, en una nube bajo el mar, bajo el mar.
Fuerte me entran ganas de cogerte y darte lo que te mereces, eso y más, me entran ganas de cogerte y darte lo que te mereces, y darte todo y más. Fuerte me entran ganas de cogerte y darte lo que te mereces, eso y más, me entran ganas de cogerte y darte lo que te mereces, y darte todo y más.
9. Abrazo en un terremoto.
Hoy me ha tocado tu mirada justo encima de las tripas, una suave pincelada, mantequilla derretida. Mirarte desde este ángulo me está volviendo loco, abrázame como si hubiera un terremoto.
Nena, no espero que me digas nada importante o ingenioso, sólo quiero que me aprietes contra tu pecho poco a poco, voy a cogerte, voy a abrazarte y a sacarte todo el jugo, tú tienes todo lo que necesito en este mundo.
Quisiera tener una memoria fotográfica, mi niña, para no perderte ya de vista ni de noche ni de día, mirarte desde este ángulo me está volviendo loco, abrázame como si hubiera un terremoto.
10. José experience.
San José experience, San José experience, y traté, traté siempre de olvidarme, y traté, traté siempre de olvidar. San José experience, San José experience, San José experience, San José experience ...
11. No puedes imaginarte.
Apareció en mi puerta un fantasma resplandeciente, era el recuerdo de mi amor que había vuelto para verme. Le escupí y le grité como quien grita para despertarse pero no era un mal sueño y ahora ya era tarde, le soplé con fuerza y no desaparecía, luego quise fumigarlo con agua bendita y no veas lo que pasó, no, no puedes imaginarte, no, no puedes imaginarte, no, no puedes imaginarte, no.
De repente me vi viviendo en una escena de mi pasado, estoy en mi cama y toco carne: ella está a mi lado, no te preocupes, nena, te prometo ser brutal, te arrastraré a un lugar que no te puedes imaginar. Te daré un amor que no puedes imaginarte, correremos por encima de todos los árboles, no te preocupes, nena, no, no puedes imaginarte, no, no puedes imaginarte, no, no puedes imaginarte, no, no puedes imaginarte, no.
No, no puedes imaginarte, no, no puedes imaginarte, no, no puedes imaginarte, no, no puedes imaginarte, no.
12. En otoño.
Suelto mis palabras, polillas en la casa vacía sin ti, sólo lo digo para el que lo quiera, lo quiera oír. Que ahora mismo puedo escuchar con un vuelco de mi corazón el sonido de cada hoja desprendiéndose del árbol en otoño, en otoño, en otoño.
Algunas veces en que uno es igual a cero y no más, es cuando me acuerdo de ti, de mi vacío y de tu voz. Porque ahora mismo puedo escuchar cada latido de mi corazón, como el ritmo de una canción que nunca empieza a sonar en otoño, en otoño, en otoño.
Ven y dime si al menos tengo en tu mente un lugar pequeñito, ven a mi lado porque ahora siento que podría no haber nacido, porque ahora mismo puedo escuchar el rugido de las aves y ver al hombre que nace viejo, y muere en el vientre de su madre en otoño, en otoño, en otoño.
Poco a poco la casa se ha ido quedando sin luz, me pregunto qué estarás haciendo en este momento tú, todos se han ido, y en la casa vacía me he quedado yo, miro por la ventana, a veces eso ayuda, y a veces no. Hoy no he parado de deambular por la casa ya sin amueblar y en cada rincón he podido ver dedos señalándome en otoño.
13. Harto de tu amor.
Siempre quiero estar harto de tu amor, tenerte tan cerca que no te quiera ver, siempre quiero estar ciego de dolor antes que no sentir nada de nada para siempre.
No quiero mirar defectos en mi amor, que la llama eterna desvela en nuestra tez, como una película, hecha por error, sin principio ni final, sin sentido, sin sentido como la muerte. ¿Es ya tarde? Todo se me escapa siempre.
Siempre quiero estar harto de tu amor, tenerte tan cerca que no te pueda ver, siempre quiero estar ciego de dolor, no dejarme llevar, arrastrar, absorber, por la corriente, siempre, siempre.
14. Ella y yo.
No puedo creer que me suceda a mí, sólo en la tele pasan cosas así, todo es tan sencillo cuando ella está aquí, me parece que estemos empezando a vivir. Ella y yo, ella y yo, ella y yo, ella y yo, ella y yo.
Un aperitivo antes de comer, el sol me mira y me siento bien, mi chica sonríe cuando empieza a llover, pisotearemos charcos otra vez. Ella y yo, ella y yo, ella y yo, ella y yo, ella y yo.
15. La estación de las lluvias.
Todo esto me recuerda la estación de las lluvias, ahora que han pasado ya varios años.
Ana tiene, Ana tiene un hermano, un hermano gemelo y él cada vez se engancha más, y cada vez, cada vez lo ama más, y cada vez su corazón se estira más.
Calentaré tu alma fría en las entrañas de un animal, sé que duele, es la vida, sólo la muerte no causa dolor. ¿Cómo puedo superar el dolor de mi hermano carnal hoy? ¿Cómo puedo estirar mi corazón para amarte aún más hoy?
Las escaleras del gran proveedor cada vez se empinan más, los caminos del señor son tan duros y pedregosos. ¿Cómo puedo superar el dolor de mi hermano carnal hoy? ¿Cómo puedo estirar mi corazón para amarte aún más? ¿Cómo puedo superar el dolor de mi hermano carnal hoy? ¿Cómo puedo estirar mi corazón para amarte del todo?
2. Viaje de redención.
Cae la noche con su manto gris, mira esa fila de antorchas que van una tras otra en viaje lunar, la Familia Lagarto peregrina ya hacia la Meca Sideral, corriente de insectos hacia la luz.
Ésta es la vía de la perfección que les pondrá más cerca de Dios, ninguno sabe bien dónde va, ninguno sabe si es mejor, pero es su viaje de redención, éste es su viaje de redención, sus alas se queman con el sol.
Ya está tranquilo el corazón, vive la calma de la destrucción, ninguno sabe bien dónde va, ninguno sabe si es mejor, éste es su viaje de redención.
3. Humo azul.
Me he quedado embobado con el humo azul de mi cigarro hasta la luz, crece y se retuerce sobre mí de forma extraña, como tú, como tú, como tú, humo azul, como tú.
En la orilla las olas del mar, y mis pies desnudos, qué bien se está, ahora noto su frescor, luego retroceden y se van, como tú, como tú, como tú, humo azul, como tú, humo azul…
En el desierto estaba yo cuando delante vi a Dios, un espejismo abrasador que entre mis huesos se desvaneció, como tú, como tú, humo azul...
4. Efervescente.
Tu efervescente admirador está en el suelo, deshaciéndose a tus pies, está gimiendo, por un poco de calor, por un helado de corazón, golpe tras golpe de corazón, de tu helado de corazón.
Tu efervescente servidor te saluda, atentamente disolviéndose en un mar de dudas, entre los dientes ya le está brotando espuma de limón, golpe tras golpe de corazón, de tu helado de corazón.
No pases nunca bajo ese árbol, que yo lo hice y desprendió como un polvillo que me produjo varias fracturas y me volvió, y me volvió efervescente, y me volvió efervescente, y me volvió efervescente, y me volvió efervescente, efervescente, efervescente, efervescente, efervescente.
Tu efervescente admirador está en el suelo, está temblando de emoción, de frío y miedo.
5. Hey, Lázaro.
Hey, Lázaro, es un milagro que puedas andar, sueña húmedo, dirige tu nave hacia la humedad. Levántate, elévate y piérdete en la humedad, levántate, elévate y piérdete en la humedad.
Hey, Lázaro, es un milagro que puedas andar, sigue el rastro, entre las medias está la señal. Levántate, elévate y piérdete en la humedad, levántate, elévate y piérdete en la humedad, oh padre viento, elévame y piérdeme en la humedad, oh padre viento, elévame y piérdeme en la humedad.
6. Ángel transparente.
En la penumbra su portal se convertía en suite nupcial. Nuestra bendita fragilidad, un día este vicio nos va a matar, más suave y más transparente que un ángel es su piel.
Toda la noche busqué las sábanas, tapándome con fastasmas, más suave y más transparente que un ángel, transparente es su piel, más suave y más transparente que un ángel es su piel.
Una eficaz alquimia en la sangre y dormiré como los ángeles, más suave y más transparente, y más suave que los ángeles y que el aire es su piel, más suave más transparente, y más suave que los ángeles y que el aire es su piel.
7. Mis huesos son para ti.
Aunque a veces pueda beber hasta estrellarme, y aunque también un día pudiera arruinarme el cuerpo y la vida, has de saber que mis huesos son para ti, mis huesos son para ti, para ti.
Aunque me veas clavándome los dedos en el centro del hígado hacia adentro, abriéndolo como un pan y repartiéndoselo a los perros, y repartiendo caos en mi familia y puñetazos a todos los demás, mis huesos son para ti, mis huesos son para ti, mis huesos son para ti, para ti.
Y aunque pueda perder el culo por una noche, por una sombra de ojos, una noche, escupiendo besos de pitón, no soy yo, no soy yo, mis huesos son para ti, mis huesos son para ti, mis huesos son para ti, para ti.
8. Fuerte!
Fuerte fue cuando Nicodemo pervirtió a San Áspide aquel verano fatal, fuerte le dijo Ana a su hermano y le apretaba las manos aquella noche fatal, fuerte me entran ganas de cogerte y darte lo que te mereces, eso y más, me entran ganas de cogerte y darte lo que te mereces, y darte todo y más.
Solos en una isla griega, siempre tirándose a matar, solos en algún otro planeta, en una nube bajo el mar, bajo el mar.
Fuerte me entran ganas de cogerte y darte lo que te mereces, eso y más, me entran ganas de cogerte y darte lo que te mereces, y darte todo y más. Fuerte me entran ganas de cogerte y darte lo que te mereces, eso y más, me entran ganas de cogerte y darte lo que te mereces, y darte todo y más.
9. Abrazo en un terremoto.
Hoy me ha tocado tu mirada justo encima de las tripas, una suave pincelada, mantequilla derretida. Mirarte desde este ángulo me está volviendo loco, abrázame como si hubiera un terremoto.
Nena, no espero que me digas nada importante o ingenioso, sólo quiero que me aprietes contra tu pecho poco a poco, voy a cogerte, voy a abrazarte y a sacarte todo el jugo, tú tienes todo lo que necesito en este mundo.
Quisiera tener una memoria fotográfica, mi niña, para no perderte ya de vista ni de noche ni de día, mirarte desde este ángulo me está volviendo loco, abrázame como si hubiera un terremoto.
10. José experience.
San José experience, San José experience, y traté, traté siempre de olvidarme, y traté, traté siempre de olvidar. San José experience, San José experience, San José experience, San José experience ...
11. No puedes imaginarte.
Apareció en mi puerta un fantasma resplandeciente, era el recuerdo de mi amor que había vuelto para verme. Le escupí y le grité como quien grita para despertarse pero no era un mal sueño y ahora ya era tarde, le soplé con fuerza y no desaparecía, luego quise fumigarlo con agua bendita y no veas lo que pasó, no, no puedes imaginarte, no, no puedes imaginarte, no, no puedes imaginarte, no.
De repente me vi viviendo en una escena de mi pasado, estoy en mi cama y toco carne: ella está a mi lado, no te preocupes, nena, te prometo ser brutal, te arrastraré a un lugar que no te puedes imaginar. Te daré un amor que no puedes imaginarte, correremos por encima de todos los árboles, no te preocupes, nena, no, no puedes imaginarte, no, no puedes imaginarte, no, no puedes imaginarte, no, no puedes imaginarte, no.
No, no puedes imaginarte, no, no puedes imaginarte, no, no puedes imaginarte, no, no puedes imaginarte, no.
12. En otoño.
Suelto mis palabras, polillas en la casa vacía sin ti, sólo lo digo para el que lo quiera, lo quiera oír. Que ahora mismo puedo escuchar con un vuelco de mi corazón el sonido de cada hoja desprendiéndose del árbol en otoño, en otoño, en otoño.
Algunas veces en que uno es igual a cero y no más, es cuando me acuerdo de ti, de mi vacío y de tu voz. Porque ahora mismo puedo escuchar cada latido de mi corazón, como el ritmo de una canción que nunca empieza a sonar en otoño, en otoño, en otoño.
Ven y dime si al menos tengo en tu mente un lugar pequeñito, ven a mi lado porque ahora siento que podría no haber nacido, porque ahora mismo puedo escuchar el rugido de las aves y ver al hombre que nace viejo, y muere en el vientre de su madre en otoño, en otoño, en otoño.
Poco a poco la casa se ha ido quedando sin luz, me pregunto qué estarás haciendo en este momento tú, todos se han ido, y en la casa vacía me he quedado yo, miro por la ventana, a veces eso ayuda, y a veces no. Hoy no he parado de deambular por la casa ya sin amueblar y en cada rincón he podido ver dedos señalándome en otoño.
13. Harto de tu amor.
Siempre quiero estar harto de tu amor, tenerte tan cerca que no te quiera ver, siempre quiero estar ciego de dolor antes que no sentir nada de nada para siempre.
No quiero mirar defectos en mi amor, que la llama eterna desvela en nuestra tez, como una película, hecha por error, sin principio ni final, sin sentido, sin sentido como la muerte. ¿Es ya tarde? Todo se me escapa siempre.
Siempre quiero estar harto de tu amor, tenerte tan cerca que no te pueda ver, siempre quiero estar ciego de dolor, no dejarme llevar, arrastrar, absorber, por la corriente, siempre, siempre.
14. Ella y yo.
No puedo creer que me suceda a mí, sólo en la tele pasan cosas así, todo es tan sencillo cuando ella está aquí, me parece que estemos empezando a vivir. Ella y yo, ella y yo, ella y yo, ella y yo, ella y yo.
Un aperitivo antes de comer, el sol me mira y me siento bien, mi chica sonríe cuando empieza a llover, pisotearemos charcos otra vez. Ella y yo, ella y yo, ella y yo, ella y yo, ella y yo.
15. La estación de las lluvias.
Todo esto me recuerda la estación de las lluvias, ahora que han pasado ya varios años.
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Año: 1992.
Procedencia de la banda: Albacete, España.
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Año: 1992.
Procedencia de la banda: Albacete, España.
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